En lo más profundo del barrio de El Carmen en Valencia encontramos esta reforma diseñada y dirigida por Carlos Gosende Salvado que sorprende por sus soluciones originales, prácticas y distendidas. El uso de persianas de madera para ocultar la despensa, el botellero de barro cocido que enriquece con un valor artesanal a la cocina y ese dinamismo que se respira por todos los rincones de la casa, hacen de esta vivienda un lugar con fresco, dinámico e inspirador.
La cocina en Serie 45 en blanco no necesita nada más. Es el botellero de barro, que resulta hipnótico, el absoluto protagonista. El éxito de la estancia reside en el equilibrio de ambas paredes, una sencilla y práctica, la otra con gran potencia visual.
Pura inspiración.